A partir de enero, a los trabajadores y jubilados miembros con recetas de medicamentos para disminuir el nivel de colesterol, conocidos como “estatinas”, no se les cobrarán contribuciones de pago por las versiones de marca libre de sus medicinas.

“Este nuevo programa de cero contribución ayudará al programa sindical de medicinas recetadas a ahorrar dinero, en tanto que recorta los costos a los miembros en estos difíciles tiempos económicos”, dijo Cynthia Chin-Marshall, administradora del Plan de Salud y Seguridad de DC 37. “Las medicinas de marca libre son una alternativa segura para las medicinas de marca, pero usted tiene que hablar con su doctor de cualquier cambio”.

En el año que finalizó el 30 de junio, el plan manejó aproximadamente 200,000 reclamos por estatinas, lo que constituyó la mayor porción de los $165.7 millones que el plan gasta en medicinas cada año. El popular Lipitor es la medicina del plan que se usa con más frecuencia.

Las estatinas de marca le cuestan al plan un promedio de $59.70 al mes, mientras que las de marca libre sólo cuestan $2.39 al mes. El plan cubrió $17.3 millones en reclamos de medicinas de marca —el 59% de reclamos de estatinas—, pero menos de $179,000 por estatinas de marca libre, lo que equivale al 41% de los reclamos.

Las medicinas de marca libre están disponibles para estatinas frecuentemente recetadas, tales como Mevacor (cuya marca libre es lovastatin), Pravachol (pravastatin) y Zocor (simvastatin). Cuando la patente de Lipitor se venza, en el 2011, el fabricante de medicinas Pfizer tendrá permitido vender una versión de marca libre durante seis meses, hasta que los competidores puedan lanzar al mercado versiones más baratas.

El plan de medicinas de DC 37 anima a los participantes a que usen medicamentos de marca libre, ofreciéndoles una estructura de tres niveles para sus pagos. Los participantes pagan $5 por una dotación mensual de marca libre; $15 por medicinas de marca de una lista preferencial, y $35 por medicinas de marca que no están en la lista preferencial.

Mientras que algunos sindicatos y patrones tienen planes obligatorios de medicinas de marca libre, exigiendo a los empleados que paguen el 100% de las medicinas de marca que tengan equivalentes de marca libre, los participantes del plan del DC 37 pagan $35 de contribución y la diferencia entre el costo del ingrediente de la medicina de marca y la de marca libre. Los consumidores han estado más dispuestos a usar medicamentos de marca libre cuando el gobierno federal y los planes de medicinas han hecho un trabajo mejor informando a la gente sobre la seguridad y eficacia de éstas. Que sean baratas es un gran incentivo para usar las de marca libre, pues por lo general cuestan una tercera parte del precio.