Por
Diane S. Williams
El 26 de febrero terminó una batalla de 9
años contra la discriminación racial ilegal en el Departamento de
Parques, cuando el gobierno de la ciudad aceptó pagar $21 millones y proporcionar
una plataforma de juego equitativo para los empleados de raza negra y latinos,
con el fin de llegar a un arreglo sobre una demanda federal colectiva.
Esta
victoria de nuestros miembros que trabajan para el Departamento de Parques es
el resultado de un caso bien planteado por la NAACP, con una amplia ayuda del
DC 37. Este caso es un modelo en la lucha contra la discriminación. Asimismo,
destaca las formas como elDC 37 y otros sindicatos les brindan a los trabajadores
una protección de importancia crítica contra el trato inequitativo
e injusto en el lugar de trabajo, dijo la directora del DC 37, Lillian Roberts.
Ésta
es una victoria que aporta justicia igualitaria para todos nuestros miembros del
DC 37 que trabajan en Parques, dijo el presidente de la Local 1505, Michael
Hood, quien preside el Comité de Política de Parques del DC 37.
El
Consejo Distrital 37 participó recopilando pruebas de que el Departamento
de Parques y Recreación, bajo la administración del entonces comisionado
Henry Stern, se había burlado de los principios del servicio civil y la
equidad racial al pagar a los trabajadores blancos más que a los afroestadounidenses
y a los latinos en los mismos puestos de empleo, dando ascensos a los blancos
con menos experiencia en puestos mejor pagados, y excluyendo de las oportunidades
de progreso de carrera a los empleados de minorías con más antigüedad.
La
demanda se inició con 11 querellas formales de las secciones 299, 983 y
1505 del DC 37, entre otras. Esta cantidad aumentó a 125 a medida que más
miembros participaron, luego de que el abogado del DC 37, Robin Roach, elaboró
una encuesta y los dirigentes locales le refirieron a otros trabajadores miembros
que estaban teniendo problemas para hacer progresar sus carreras en Parques.
El
arreglo cubre a 3500
El arreglo cubre a cerca de 3500 empleados
actuales y retirados en Parques, quienes fueron discriminados de 1997 a 2004.
El
principal obstáculo que teníamos que superar eran 9 años
de resistencia del gobierno de la ciudad frente a la abrumadora evidencia de discriminación
por raza y nacionalidad, contó el abogado Lewis M. Steel. Una decisión
de la Comisión de Igualdad de Oportunidades de Empleo les permitió
a los trabajadores del Departamento de Parques presentar una acción legal
colectiva ante los tribunales federales en 2001.
El gobierno municipal
montó un poderoso plan bien financiado para oponerse a estos casos que
debieron haberse resuelto rápidamente, manifestó Steel. El
gobierno de la ciudad falló en tener un sistema eficaz de inspección
de sus propias prácticas de contratación y ascensos. Han pasado
44 años desde que fueron promulgadas las leyes de derechos civiles; eso
debería ser un tiempo suficiente para figurarse cómo hacerlas cumplir
efectivamente.
Ahora, el Departamento de Parques ha instalado sistemas
que revisan los patrones raciales en desigualdades de pago y clasificaciones de
puestos, explicó Steel.
El caso fue manejado por Steel, el Fondo
de la NAACP para la Defensa Legal, y la firma Beldock, Levine and Hoffman. Pueden
obtenerse los detalles en: www.naacpldf.org.
El
Comité de Política de Parques del DC 37, los presidentes locales
y los representantes sindicales se reunirán con Steel y con otros abogados
el 3 de abril para hablar cómo este arreglo causa un efecto en los miembros
y cómo se implementarán las nuevas políticas en el Departamento
de Parques.
Este caso les envía a la dirección de Parques
y a todos lados un claro mensaje: que el DC 37 considera que todos los trabajadores
se merecen ser tratados con justicia, dignidad y respeto. Asimismo, pone a los
patrones bajo advertencia contra el intento de crear un sistema de dos niveles
para hacer a un lado la Ley de Servicios Civiles, indicó Roberts.
DC
37 no permitirá que esta victoria permanezca aislada. De hecho, actualmente
estamos presionando por otro litigio a gran escala que, aunque no implica discriminación
racial, tiene como meta proteger los derechos de los trabajadores en el Departamento
de Educación y en el Departamento de Policía de Nueva York,
añadió ella.
Por su parte, Hood indicó: Las
ruedas de la justicia giran lentamente, pero en este caso la justicia ha prevalecido.