El
plan de estímulo económico de 787 billones de dólares propuesto
por el presidente Barack Obama permite que a los residentes fuera de Manhattan
se les haga una deducción libre de impuestos de su salario por transporte
público.
Con este plan del gobierno de la ciudad para los residentes
de fuera de la isla que usan autobuses locales y trenes subterráneos, los
participantes inscritos en el programa TransitChek pueden ahora deducir cada mes
hasta un máximo de $230.00 libre de impuestos de su pago por costos de
transporte. Antes de que el presidente Obama firmara el plan de estímulo,
el límite era de $120.00.
Quienes toman el tren subterráneo
y el autobús pueden ahorrar cientos de dólares al año con
este programa de tránsito.
El aumento al máximo de deducciones
permitido ayudará a los usuarios del autobús express, y será
de particular valor para los miembros sindicales que se transportan en el ferrocarril
Long Island Rail Road, así como en los autobuses Long Island MTA y en el
ferrocarril Metro-North, si es que el gobierno municipal implementa el contrato
ampliando el programa de tránsito para que los cubra.
De conformidad
con el acuerdo económico sindical 2005-2008, las autoridades de la ciudad
aceptaron ampliar ese programa para cubrir a los miembros sindicales que usan
tres proveedores de tránsito regional público, pero a finales de
marzo el contrato todavía no había sido puesto en práctica.