Los trabajadores del sector público de Puerto Rico celebraron este 17 de mayo una importantísima victoria, cuando el gobernador republicano Luis Fortuño firmó una ley que reinstala sus derechos de negociar colectivamente.

EL PROYECTO de subcontratación externa del alcalde para rediseñar el sistema de llamadas de emergencia 911 ha puesto una marca sin precedentes de exceso de gasto del presupuesto: va en mil millones de dólares y sigue creciendo. Me entristeció la auditoría que el contralor de la ciudad John Liu publicó el 30 de mayo, que muestra una supervisión de la administración tan descuidada, que a un contratista no calificado se le permitió cobrarles un exceso de impuestos de $163 millones a los contribuyentes, pues nuestros miembros y el pueblo pagan por estos episodios repetidos de incompetencia.

El proyecto de 911 lleva ya siete años de retraso, con sólo uno de sus principales componentes instalado y funcionando. Liu ha urgido al Procurador de Justicia del Distrito a que investigue un posible fraude y ha convocado al gobierno municipal a que use sus averiguaciones para determinar cuánto dinero debería ser recuperado.

Durante nueve años en que he sido su directora ejecutiva, he estado haciendo una campaña contra el "gobierno a la sombra" de contratistas y consultores, a quienes frecuentemente se les paga muchísimo más que a nuestros miembros por hacer el mismo trabajo, y que deterioran el sistema de contratación por méritos del servicio civil, el cual históricamente ha proporcionado una vía libre de parcialidad hacia los empleos estables, decentemente pagados.

A lo largo de los últimos cinco años, a medida que se ha duplicado el gasto total del gobierno citadino a más de $10 mil millones, nuestro proyecto de investigación, difundido por nuestro director associado Henry Garrido, ha revelado un extendido abuso de subcontratación de la administración de Bloomberg. Nosotros hicimos público el derroche y el fraude en audiencias del sindicato el año pasado, y en noviembre, realizamos una recapitulación especial para nuestros congresistas locales, enfocándonos en cómo la contratación externa amenaza nuestros empleos, nuestra economía local y el uso apropiado de los fondos federales.

Poco después de la recapitulación informativa de noviembre, el Consejo Municipal de la Ciudad invalidó el veto del alcalde y fortaleció la ley local de regulación de la contratación. Y ahora, 11 miembros del Congreso Federal que representan la ciudad de Nueva York han exigido una investigación federal del derroche, el fraude y la falta de supervisión en el uso de la administración del dinero federal al subcontratar.

Mal uso de fondos

Como el gobierno federal otorga a la ciudad de Nueva York casi $7 mil millones al año, los congresistas le escribieron al Contralor General Federal, pidiendo una investigación gubernamental por sus "serias preocupaciones sobre múltiples abusos de los fondos federales" de la administración de Bloomberg. Especialmente citaron el "mal uso de fondos federales para los empleados privatizados" como un obstáculo para "la contratación por méritos de empleados que en la mayoría de los casos están más calificados", tal como lo piden las pautas de financiamiento federal.

CUADRO DE HONOR: Quiero agradecer a los congresistas que firmaron esta carta tan importante -Jerrold Nadler, Nydia Velázquez, Gregory Meeks, Edolphus Towns, Yvette Clarke, Joseph Crowley, José Serrano, Eliot Engel y Gary Ackerman - y especialmente a Charles Rangel por su papel organizativo fundamental, y a Carolyn Maloney por sus destacadas contribuciones. Nuestro sindicato nacional, la Federación Americana de Empleados Estatales, de Condados y Municipales, con 1.6 millones de miembros, trabajó estrechamente con nosotros aquí y nos ha proporcionado una ayuda tremenda en nuestra batalla por limitar la subcontratación externa y proteger los empleos de nuestros miembros.

Este año más que nunca, su organización sindical necesita que usted vote por funcionarios públicos a los que les importa salvar los empleos y poner un fin a la corrupción y al derroche de la subcontratación. El poder está en nuestras manos, si votamos.