Por ALFREDO ALVARADO

Con más de un millón de neoyorquinos y turistas mirando desde las aceras, el Comité de la Herencia Latina del DC 37 marchó orgullosamente por la Quinta Avenida con el candidato a alcalde John Liu este 9 de junio, en el 56avo. desfile anual del Día de Puerto Rico.

El 28 de mayo, los delegados del DC 37 votaron unánimemente por dar su respaldo oficial a Liu -ex concejal municipal de Flushing , Queens, quien actualmente funge como contralor de la ciudad de Nueva York- en las próximas elecciones primarias del Partido Demócrata, a celebrarse el 10 de septiembre. El animado contingente fue encabezado por el subdirector del DC 37 Henry Garrido, y la presidenta del Comité de la Herencia Latina Carmen Flores, secretaria de actas del Sindicato Local 1549.

Otros candidatos a las elecciones primarias se sumaron en ese soleado domingo al desfile, pero Liu fue claramente el favorito de los sindicalistas ahí reunidos.

"Es un honor para nosotros estar marchando con John Liu y ayudándolo a llevar el voto a las casillas en las elecciones primarias de septiembre", indicó Flores, mientras los miembros del Comité repartían volantes a lo largo de la 5ª. Avenida.

"No podríamos pedir mejor amigo que John Liu", manifestó Santos Crespo, presidente del Sindicato Local 372 y ex presidente del Comité de la Herencia Latina "Se ha mantenido firme con la organización sindical cuando lo hemos necesitado, y vamos a estar con él y a asegurarnos de que en noviembre él se mude a la alcaldía", dijo Flores, mientras ella junto con Liu blandían la bandera roja, blanca y azul de Puerto Rico.

Liu ha trabajado con el DC 37 para recortar el derroche y la corrupción de la subcontratación externa que ha habido bajo la administración de Bloomberg. Él ha arremetido enérgicamente contra Bloomberg por su irresponsabilidad de dejar a 300 mil empleados municipales sin contratos y sin aumentos pro muchos años, y alegando que el gobierno citadino no tiene con qué pagar los auaumentos salariales retroactivos esos años, mientras estaba regalándoles a los contratistas externos aumentos anuales ajustados al costo de vida y mientras el presupuesto está mostrando un superávit enorme.