Por Lillian Roberts,
Directora Ejecutiva DC 37, AFSCME
Me
sentí orgullosa y emocionada cuando los empleados de la MetroPlus HMO de
la Corporación Health and Hospitals votaron por integrarse al DC 27, en
febrero pasado.
Para mí, su decisión significó que
el transcurso de la historia había cerrado un ciclo completo. Cuando en
los años 60 llegué al DC 37, como la auxiliar de enfermera que fui,
yo era responsable de organizar sindicalmente a los trabajadores de hospitales
públicos auxiliares, oficinistas y otros y nuestra enorme
victoria puso al DC 37 en camino de convertirse en el sindicato de empleados municipales
más grande y más fuerte.
Reto formidable
Creo
que la victoria de MetroPlus dará inicio a varios logros similares en los
meses y años por venir. Ahora es el momento de que el DC 37 cumpla con
el desafío organizativo, que es una de las más apremiantes prioridades
del movimiento laboral de principios del siglo XXI.
El reto es formidable.
Hoy como nunca antes en nuestra vida, el pueblo asalariado está bajo ataque.
Aunque el DC 37 está por encima del promedio, los sueldos están
declinando y estancándose. Las pensiones tradicionalmente establecidas
están desapareciendo. Y los patrones les están pas-ando el costo
de la atención médica a sus empleados.
A nivel nacional,
la situación es especialmente atroz en el sector privado, donde la cifra
es perturbadora: de cada 100 empleados, 92 carecen de representación sindical.
Afortunadamente, nuestra situación es mejor en el sector público,
donde más de un tercio de los trabajadores está sindicalizado. Nueva
York es el segundo estado más sindicalizado del país, pero aún
así, aquí sólo el 24.4% de las personas asalariadas está
en sindicatos.
Nuestro desafío dentro del DC 37 es ampliar nuestra
fuerza como parte de la construcción de un movimiento laboral lo suficientemente
grande y fuerte como para recuperar la Casa Blanca y reconstruir normas dignas
de vida para las familias asalariadas.
Como una luz de esperanza dentro
del movimiento laboral, necesitamos correr la voz sobre la ventaja de estar sindicalizado.
Los trabajadores afiliados ganan un 30% más de los trabajadores sin organización.
El 80% de los trabajadores sindicalizados tienen seguro médico pagado por
su empleador, en comparación con menos de la mitad de los trabajadores
no sindicalizados. Además, los trabajadores sindicalizados tienen una poderosa
voz para hablar por ellos y exigir justicia en el empleo.
Queremos que
todos los trabajadores disfruten las ventajas que nosotros tenemos. Al enfocarnos
en afiliar trabajadores en el DC 37, nos estaremos uniendo al esfuerzo de nuestro
sindicato nacional, la Federación Americana de Empleados Estatales, de
Condado y Municipales (AFSCME).
Hemos presupuestado fondos para establecer
un Departamento de Organización Sindical, y la AFSCME está ayu-dando
con aportes de dinero y con la asignación de Edgar DeJesús, el director
de Servicios a las Bases Sindicales y de Organización de la Región
del Este de la AFSCME para que trabaje con nosotros como nuestro director interino
de organización.
Actualmente, el DC 37 está analizando las
oportunidades de sindicalización dentro del gobierno de la ciudad y en
instituciones que brindan servicios públicos. Lo que estamos preparados
para hacer inmediatamente es crear una red de activistas interesados en participar
en la misión organizativa del sindicato.
Estoy pidiendo a todos
los miembros que quisieran ayudar al crecimiento de nuestro sindicato que se vuelvan
parte de esta estimulante nueva red de activistas.
Al participar, usted
puede estar a la vanguardia de un esfuerzo nacional por revitalizar al movimiento
laboral del país, mismo que jugará un papel clave para poner fin
a la era conservadora por la que hemos pasado en el último cuarto de siglo.
¡Únase a nosotros!