Como parte de una campaña
nacional para preservar la vivienda pública y proteger los empleos y los
hogares de nuestros miembros, los trabajadores miembros del DC 37 han enviado
más de 1,600 cartas al Congreso para llamar la atención sobre el
presupuesto federal y los problemas de políticas que afectan a las agencias
de vivienda pública, tales como la Dirección de Vivienda de la Ciudad
de Nueva York (la NYC Housing Authority: NYCHA).
El sindicato nacional
del DC 37, la Federación Americana de Empleados Estatales, de Condados
y Municipales, está encabezando el llamado a que el Congreso promulgue
políticas sensibles y un financiamiento adecuado para que las agencias
puedan operar y modernizar la vivienda pública, explicó la directora
de Acción Politíca, Wanda Williams.
Más de 15,000
miembros del DC 37 habitan en viviendas públicas y 3,000 miembros trabajan
para la NYCHA. A nivel nacional, la vivienda pública brinda unidades de
renta a precio accesible para cerca de 1.1 millones de personas, muchas de las
cuales son ancianos e incapacitados.
Muchos edificios de vivienda fueron
construidos hace más de medio siglo para cumplir con las crecientes necesidades
después de la Segunda Guerra Mundial. Pero hoy han quedado sin repararse
y han quedado atrapados entre la escalada del aumento de costos operativos y el
retraso del financiamiento federal.
La administración del Presidente
George Bush quiere pasar el pago de estos costos a los residentes, quienes ya
de por sí batallan por pagar sus cuentas del mes.
Al apoyar la
iniciativa de ley No. 5576 para la Cámara de Representantes, las cartas
de los miembros del DC 37 le piden al Congreso ampliar la fecha límite
para que las agencias cumplan con el difícil sistema administrativo nuevo
del Departamento de Desarrollo Urbano y de Vivienda; para que conserven el uso
flexible del Fondo Capital de Vivienda Pública, y para que inyecten $283
millones en el presupuesto de este año para balancear los costos de utilidades
de las agencias de vivienda pública.